Este patio se encuentra situado en la calle del Ángel, 20

Nombre de indudable arraigo popular, fue eliminado del callejero oficial al unificarse, bajo el nombre común de “calle de San Juan de los Reyes”, a las que antes se llamaban del Ángel y de la Portería de San Juan de los Reyes. No es éste el único ejemplo de refundición de dos o más calles en una sola, pues lo mismo se acordó respecto de las calles de Sillería y Alfileritos; en ambos casos sin éxito alguno.

El origen de ese nombre angélico es claro. Se debe a la estatuilla gótica con un escudo ornado de un león rampante (posible alusión al cardenal Tenorio) que la preside hacia la mitad de su trazado, situada en una hornacina antes protegida con una reja y dejada, hace pocos años, certeramente, al descubierto. Como es corriente en tales símbolos de devoción popular, no se conoce el motivo de que tal escultura se situase allí; lo que puede deberse tanto a una devoción privada de algún vecino, dueño de la casa, o a algún olvidado suceso, real o legendario.

El licenciado Moraleda recogió en sus notas inéditas cierta leyenda de una dama de la corte que enfermó estando aquélla en Toledo, apareciéndose en tal situación un ángel que le anunciaba su curación próxima, como sucedió en efecto. La imprecisión de fechas, personajes y otros detalles en esta breve noticia pueden obedecer a estar próxima a su extinción la tradición recogida por nuestro crédulo investigador, o bien a la acreditada imaginación de éste, que pudo llevarse la estatua allí desde otra vivienda más apropiada, o desde el próximo puente de San Martín, restaurado por aquel Arzobispo, como es sabido; no obstante, la recogemos como única explicación que conocemos.

En 1776 se llamaba ya como hoy, y por lo tanto, ya estaba la estatua en su lugar o al menos en la calle. (Fuente: Historia de las Calles de Toledo)